Llega el verano y con él la posibilidad de escaparnos de nuestra ciudad e irnos el máximo de tiempo que podamos. Si queremos o necesitamos estar conectados y tener internet nuestro teléfono móvil nos puede ayudar unos días pero no si tienes suerte y tu estancia se puede alargar un poco más.
Dependerá de cada usuario y sus necesidades, elegir la opción que mejor convenga. Hay que tener en cuenta el tiempo que pasaremos en la segunda residencia, lo que vayamos a usar internet, cuántos seamos y el uso que tengamos pensado darle al servicio. Son estas las preguntas clave que nos debemos hacer. Cada circunstancia es diferente, no es lo mismo que vayamos 10 días a la playa de puro ocio y «colegueo» que estar tres meses fuera de casa, tener la necesidad de teletrabajar o entretener a tus hijos con dibujos y series.
Son varias las opciones disponibles para tener internet en segundas residencias o en estancias temporales.
En Mvoy hemos seleccionado tres para detallarlas:
Cada una de estas alternativas tiene ventajas y diferencias que vamos a analizar para que puedas encontrar la que mejor se adapte a ti.
Es una de las opciones más cómodas e instantáneas. Si tienes smartphone, tienes un WiFi portátil. Se trata de utilizar la función de compartir internet, convirtiendo tu dispositivo en un router. Lo más adecuado en este caso, es que si vas a utilizar esta alternativa tengas datos ilimitados, de lo contrario los consumirás rápido.
Para conexiones puntuales o estancias de pocos días
No tiene permanencia, ni coste adicional y no necesita contratación ni instalación
La velocidad es más inestable que la conexión por fibra. Limitado por la cobertura que haya en el lugar en el que estés
Dependes de una buena cobertura móvil y una tarifa con muchos GB o ilimitada
Se trata ni más ni menos que el denominado “pincho” pero esta es la versión mejorada. Ahora modernizado, se trata de un dispositivo que te permite conectarte como si fuese tu router habitual de fibra pero funciona a través de una tarjeta SIM y al que podrás acceder desde los dispositivos que quieras.
Son las conexiones conocidas como 4G en casa. Es una opción parecida a la anterior pero utilizando el router y no el smartphone.
Conexiones de duración intermedia o varias residencias
No necesita instalación. Con este sistema tienes libertad de movimiento
La velocidad es más inestable que la conexión por fibra. Limitado por la cobertura que haya en el lugar en el que estés. Si sois muchos conectados irá lento y se agotarán los datos rápido
Comprar un router y solicitar una multiSIM para tener una SIM en tú smartphone y otra en el router para compartir así los GB de tu tarifa. También puedes contratar este servicio con una compañía o añadir una línea adicional a tu contrato
Si la fibra llega a tu segunda residencia, contratar esta opción por más de un mes, es una buena elección. Los operadores ofrecen tarifas especiales para los clientes que ya tienen contratado el servicio en su residencia habitual.
Para conexiones prolongadas, estancias en segundas residencias de más de un mes
Conexiones a internet más rápidas y estables sin preocuparte de agotar los datos de tu teléfono móvil o de si hay o no hay cobertura
Es un proceso más lento, algunas contrataciones pueden demorarse mucho tiempo desde la solicitud e incluir permanencias
Requiere visita de un técnico e instalación